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La caída del peso colombiano pone en duda la transición energética de Petro

La caída del peso colombiano pone en duda la transición energética de Petro

Imagen ilustrativaPaul Souders / AFP

La devaluación del peso colombiano pone en tela de juicio el compromiso del Gobierno de Gustavo Petro para comenzar a eliminar los combustibles fósiles, que representan aproximadamente la mitad de las exportaciones del país, recoge Bloomberg citando a expertos.

“El Gobierno llegó con ideas políticamente muy fuertes, pero está dándose cuenta de que las cosas que dice ya tienen consecuencias en otros ámbitos”, comentó el exministro de Minas y Energía colombiano, Tomás González, agregando que el Ejecutivo podría verse obligado a ceder en su agenda política, dada la importancia de los hidrocarburos para su posición fiscal.

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Durante su campaña electoral, Petro afirmó que la exploración petrolera se iba a detener y su ministra de Minas y Energía, Irene Veléz, que no habría nuevos contratos. Sin embargo, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, la contradijo y dijo este jueves que no descarta la posibilidad de que se firmen nuevos contratos de exploración, agregando que la seguridad y autonomía energética del país están garantizadas, pues actualmente hay casi 200 contratos sobre la mesa, reseña El Espectador.

En relación a un proyecto de ley recientemente aprobado que supone un recargo al impuesto para las empresas de petróleo y carbón, González considera que la medida hará a Colombia aún más dependiente de esos hidrocarburos, dado que cerca de la mitad de los 20.000 millones de pesos (4.000 millones de dólares) que el Gobierno pretende recaudar anualmente provendrán precisamente de los productores de combustibles fósiles.

Hablando del gas natural, González indicó que, según los pronósticos, para el 2030, el país tendrá que importar cerca de 40 % del gas que necesita para su demanda interna, lo cual —afirma— no tendría sentido desde una perspectiva ambiental.

“Si terminamos comprando de EE.UU., es bien posible que venga de la fracturación hidráulica”, una técnica de extracción que Petro busca prohibir en el país suramericano, agregó.

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